Mi experiencia:
Fue un taller que tenía pendiente, pero con flojera y pensando “ojalá me ayude”, “espero la magia”.
No fue magia porque tengo y tuve que trabajar en mí, pero si fue magia por que en poco tiempo trabajé cosas de años y que me afectaban a mil.
Me voy feliz con un cambio de actitud y con tantas ganas de seguir adelante con este trabajo.